Teoría de Stranger Things da un giro inesperado a la serie

La primera temporada de Stranger Things terminó relativamente bien: todos felices y contentos en la víspera de Navidad, los niños jugando RPG, los adolescentes enamorados… pero puede que esta felicidad termine muy pronto. Un fan de la serie elaboró una teoría sumamente interesante sobre la historia y, lo mejor de todo, es que tiene mucha lógica. HAY SPOILERS.

La base de la teoría es lo siguiente: ¿y si el otro lado en realidad no fuera una dimensión paralela, sino el futuro?

Fíjate bien: la Hawkins de “el otro lado” se asemeja más a una versión postapocalíptica de nuestro mundo que a un universo paralelo. En aquel lugar hay construcciones en ruinas, postes caídos, automóviles abandonados, un montón de polvo y luces intermitentes (¿cómo fue a parar todo esto allá?) – y lo más interesante: osamentas humanas, mismas que parecen haber estado en el otro lado desde mucho antes que Will o Barb aparecieran por allí.

De hecho, deben ser de mucho antes que el monstruo encontrara el pasaje hacia Hawkins. Recordemos: Hopper, el jefe de la policía, dice que previo a la desaparición de Will, la ciudad era apacible y exenta de crímenes – entonces, esas osamentas no pudieron haber venido de raptos previos del monstruo. De alguna manera, los restos pertenecen a ese lugar, evidencia que sugiere que los seres humanos ya estuvieron (o incluso habitaron) en determinado momento en el otro lado.

En la teoría de Abner Pereira, cuando Eleven hace contacto con el monstruo, sin querer, acaba provocando una alteración temporal. Por eso, “la solución que encontró la naturaleza para corregir el desequilibrio fue abrir un portal entre el futuro y el presente”, se explica en el texto. Y existe una razón para esto:

Si creemos que el agujero por donde sale el monstruo representa esa interrupción temporal, tiene sentido que el laboratorio empiece a ser “contaminado” por el otro lado: lo que sucede es que el lugar simplemente está “caminando” en dirección al futuro. También es posible observar como las personas del presente afectan físicamente al futuro: cuando Nancy y Jonathan intentan incendiar al monstruo en la casa de Will (en el presente), el suelo también queda marcado para Joyce y Hopper que se encuentran en el otro lado (en el futuro).

Incluso los creadores de la serie, los hermanos Duffer, dicen que “deberíamos estar preocupados por mucho más que solo lo de Will”. Como todo el elenco naturalmente va en dirección al futuro, podría ser exactamente eso lo que ellos quieren decir – que el peligro más grande aún no sucede.

Pero vamos por partes, que todavía hay más. Y prepárate que esta parte es tan poderosa como un coscorrón psíquico de la propia Eleven.

En la misma entrevista en que hacen mención de Will, los Duffer dicen: “sobre el otro lado, tenemos un documento de 30 páginas que explica lo que significa, de dónde vino el monstruo y por qué no existen más monstruos”. Es decir, solo existe un monstruo y podría no haber nacido en el otro lado.

Y si dicho ser no nació allá, no habría ninguna otra amenaza en aquella realidad – es decir, el otro lado no era un lugar malo por naturaleza, sino que se convirtió en un sitio de terror a partir del instante en que el monstruo llegó.

¿Entonces, de dónde pudo haber venido si no es del otro lado? ¿Y por qué apareció precisamente en Hawkins? Por ahora solo podemos pensar en la única relación que hay entre los dos mundos: Eleven. Dando continuidad a esta línea de pensamiento, podemos concluir que la pequeña Eleven es el monstruo.

Por supuesto, Eleven no siempre fue el monstruo, pero se transformaría en él. La metamorfosis acontece cuando se sacrifica para salvar a Mike y a los niños: es enviada, totalmente sola, a un futuro caótico, donde no existe nada más que los traumas de los abusos que sufrió en el laboratorio del Dr. Brenner. Sabemos que sigue con vida en el otro lado, pues Hopper le deja comida en aquella caja en el bosque, ¿pero en qué condiciones psicológicas se encuentra? Con el tiempo, Eleven es consumida por el dolor que pasó y acaba convirtiéndose en el monstruo.

Existen otras evidencias de que “El” es el monstruo. Para empezar el ente no sigue las reglas de los poderes mentales de la niña. Una de las habilidades de Eleven (explorada de forma especial por el Dr. Brenner) es extender su conciencia y entrar en contacto con la mente de otros seres. Sabemos que ella solo puede hacer eso con una persona a la vez: vemos eso cuando espía al hombre ruso, y también cuando busca a Barb y a Will – debe buscar uno a uno.

Solo hay una excepción a la regla: el monstruo. “El” también logra hacer contacto con la conciencia del monstruo al mismo tiempo que observa al ruso, y al mismo tiempo que busca por Barb y Will. Esto porque, según la teoría, el monstruo no es otra conciencia que la de la niña, escondida, esperando para ser liberada. Cuando El “toca” al monstruo, toma conciencia de todo, lo que abre el portal en el tiempo que mencionamos antes.

¿Quieres más? Pues aquí tienes: los niños apodaron a la criatura Demogorgon, como uno de los monstruos del RPG que juegan, Dungeons and Dragons. Podrían haber elegido cualquier otro monstruo (hay cientos de opciones), pero eligieron precisamente ese: un ser de dos cabezas, cada una con una personalidad diferente, una queriéndose librar de la otra (lo que podría simbolizar la relación entre Eleven y el monstruo), además que probablemente sea hembra, pues puede colocar huevos (como se puede ver cuando Joyce y Hopper van en búsqueda de Will).

Eleven también parece reconocer a Barbara en la fotografía en la habitación de Nancy, y eso que nunca antes se habían encontrado. El monstruo ataca y rapta a Barb al comienzo de la serie. ¿No será acaso que en el momento que ve la fotografía reconoce a la adolescente que captura en el futuro? Quizá sí, quizá no. Pero de que tiene sentido, lo tiene.

Hasta ahora, la publicación de Abner en Medium ya acumula un número considerable de visualizaciones y también se ha viralizado en las redes sociales. El autor pasó cuatro días investigando sobre la serie en foros de discusión y en sitios especializados, el objetivo era re-digerir la primera versión de la teoría que fue, al poco tiempo, mejorada por la sugerencia de los lectores. “No me había dado cuenta del detalle de los esqueletos, y tampoco de que Eleven solo logra entrar en contacto con una conciencia a la vez, con excepción del monstruo. Eso ayudó mucho a complementar la teoría”, explica.

Ahora lo único que queda es esperar para ver si ese futuro se convierte en realidad, o si esto no pasa de una simple historia inventada por los fans.

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